Foto: Rebeca García Merino

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Museo Museo del Greco
Inventario CE00024
Clasificación Genérica Pintura
Objeto/Documento Cuadro
Autor/a Tristán, Luis (Lugar de nacimiento: Toledo, 1580 - Lugar de defunción: Toledo, 1624) Escuela/Taller: Toledana
Título Cristo Crucificado
Materia/Soporte Lienzo: Tela
Marco: Madera
Técnica Óleo
Dimensiones Lienzo: Altura = 213 cm; Anchura = 119 cm
Marco: Altura = 236 cm; Anchura = 143,50 cm; Profundidad = 8,20 cm
Descripción Figura masculina crucificada con tres clavos sobre un fondo cubierto de nubes de tonos pardos y rojizos en el que se aprecia la silueta de una ciudad. El hombre tiene la cabeza levantada y girada hacia su izquierda dirigiendo la mirada hacia la parte superior del lienzo. Tiene cabello largo y barba. Su cuerpo se cubre a la altura de la cintura por una pequeña tela blanca anudada en su lado derecho y ciñe su cabeza una corona de espinas, sobre la que está situada, en la parte superior de la cruz, una inscripción. Numerosas gotas de sangre caen de sus brazos y resbalan por su cuerpo y por la cruz. A los pies de la cruz aparecen una tibia y una calavera.

La representación del Crucificado se repite con frecuencia en el taller del Greco del que Luis Tristán fue su principal continuador. La figura de Cristo, con la cabeza alzada y el cuerpo contorsionado, fue un éxito devocional en el Toledo de principios del siglo XVII. Se conservan varias versiones con el mismo asunto, en diferentes lugares de la ciudad. Es obvio que tanto el alargamiento de las proporciones como la violencia del claroscuro y el modelo del rostro derivan del Greco, aunque en la pintura de Tristán también se aprecian influencias de otros artistas que pudo conocer en Toledo, Madrid y sobre todo en Roma ciudad a la que viajó para completar su formación justo en el momento de eclosión del naturalismo tenebrista.

Se trata de una pintura de tamaño considerable, de Luis Tristán, considerado el mejor y más eficiente discípulo de el Greco. La escena se describe sobre unos desnudos cerros y sobre ella, una cruz a medios desbastar. El fondo de nubes rojizas acompaña la mirada de dolor y sufrimiento de Cristo, de un tamaño menor que el natural.

La interpretación de obras de su maestro se ve en cuadros como el Cristo Crucificado, donde tanto el alargamiento de las proporciones y la cabeza pequeña de cristo, así como la violencia del claroscuro, el paño de pureza y el modelo del rostro derivan del Greco, dentro de un paisaje que anticipa la tragedia. La figura de Cristo, con la cabeza alzada y el cuerpo más o menos contorsionado, fue un éxito devocional en la Toledo de principios del siglo XVII, y se relaciona por su ambiente con obras de Orrente y de Ribalta.

Recuerda el de la sacristía de Capilla de los Doctores en la Catedral de Toledo y en otras iglesias de la misma ciudad. El Cristo se inspira en el crucificado Colonna de Miguel Ángel, y su modo de representarlo recuerda a los crucificados de Guglielmo della Porta, con la pierna derecha ligeramente inclinada sobre la izquierda y desnuda, pues el paño de pureza se aparta dejando solo la soga que lo sostiene. También su iconografía barroca recuerda al Sanguis Christi, el Cristo que vierte sangre de su cuerpo para lavar los pecados de la humanidad. Semejase al admirable Cristo con San Francisco, del Marqués de Casa-Torres, aunque éste revela una técnica más avanzada. Otro Cristo que para Burger era digno de Velázquez, había en la Colección Madrazo.

Tristán realizó varias versiones de la crucifixión de Jesucristo, asunto clave de la religión católica y sobre el cual el Greco había realizado los ejemplares más significativos del momento. En algunas versiones de Tristán se incluyen las figuras de la Magdalena y San Juan o las de los dos ladrones; en otras, aparecen elementos arquitectónicos y urbanos, referencia a la ciudad de Jerusalén. Se relaciona también con el Crucificado de la iglesia de Santo Tomé, con calavera y tibia al pie de la Cruz y horizonte de cerros desnudos. Del mismo tipo parece derivar una copia de taller o escuela, conservada en la iglesia toledana de San Justo, de dimensiones 1,10 x 0,83 m, con un paisaje de tono muy barroco, muy ajeno a su arte.

Adquirido para el museo en 1921 con la consignación que tenía éste para su mantenimiento. La atribución a Tristán se basa en el de la Sacristía de los Doctores de la catedral de Toledo, con atribución tradicional e indiscutida. Es una de las mejores versiones del tema. El marco es de nueva construcción, en estilo de la época, bajo la supervisión de D. Mariano Rodríguez de Rivas.
Es interesante destacar el catálogo de la exposición sobre "Luis Tristán", de Alfonso Pérez Sánchez y Benito Navarrete Prieto (2001).
Datación 1624 (Primer tercio del siglo XVII)
Contexto Cultural/Estilo Barroco
Lugar de Procedencia Toledo(Castilla-La Mancha, España)
[De procedencia desconocida, fue adquirido por el Patronato del Museo en 1921.]
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Foto: Rebeca García Merino

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Foto: Antonio Pareja

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Foto: Miguel Ángel Otero Ibáñez

Foto: Antonio Pareja

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