| Clasificación Razonada |
En noviembre de 1774 el conde envía desde París al maestro francés Francisco Martín, para continuar con las pruevas precisas para el establecimiento de la dicha Porcelana. Martín también ensaya con la llamada tierra de Pipa de Inglaterra. Fue perfeccionado por durante la dirección de Pierre Cloostermans.
La tierra de pipa toma su nombre por ser similar a la tierra utilizada para las pipas chinas, y es de un color cremoso, con cubierta pulida y brillante, y casi nunca pintada con colores.
Esta tipología de piezas puede seguir modelos de piezas realizadas en plata.
El éxito de la cerámica de la Fábrica había provocado que en localidades cercanas como Onda (1778) y Ribesalbes (1781), y sobre todo en la propia Alcora, se fundaran alfares más modestos pero que, con el trabajo de operarios salidos de la misma Fábrica, imitaban sus moldes y decoraciones, y vendían sus productos a un menor precio. No se sabe con exactitud cuándo comenzaron a funcionar, pero son conocidos los continuos esfuerzos por parte de la dirección en contra de esta competencia. En 1784 la Junta de Comercio y Moneda, autoriza a la Real Fábrica de Alcora a que marque sus productos con una A, y en 1788 obliga a las otras «fabriquetas» a elegir una marca diferente «que cada uno debe husar en la loza de sus respectivos hobradores».
TODOLÍ PÉREZ DE LEÓN, Ximo, 2003: La fábrica de cerámica del Conde de Aranda en Alcora : historia documentada, 1727-1858. Asociación de Ceramología, Alicante, 2003
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