Foto: Susana Vicente Galende

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Museo Museo Sorolla
Inventario 20003
Clasificación Genérica Escultura
Objeto/Documento Herma
Autor/a Anónimo
Materia/Soporte Mármol blanco
Técnica Tallado
Dimensiones Altura = 18 cm; Anchura = 11,50 cm; Profundidad = 5,50 cm
Descripción Altorrelieve de formato rectangular con la representación de una cabeza masculina barbada de rostro sereno y clásico con ojos almendrados y nariz recta. El cabello está ceñido por una diadema de pámpanos y cae en amplias ondas a los lados de la cara, hacia el arranque de los hombros ciñéndose al marco rectangular del altorrelieve. La barba se compone de largos bigotes, perilla, a modo de dos bucles y la barba propiamente dicha que está formada por seis tirabuzones que aumentan de longitud hacia el centro.
Iconografia Hermes báquico
Datación 1=100 (s.I- II d.C)
Clasificación Razonada Escultura que representa una figura barbada en altorrelieve, fechada entre los siglos I- II d. C. Lleva el cabello ceñido por una diadema de pámpanos cayendo en amplias ondas a los lados de la cara, hacia el arranque de los hombros. El rostro, de rasgos arcaizantes, muestra una nariz recta en perfil desde la frente y un ligero rictus de sonrisa en los labios. El bigote y la perilla, formados por volutas hacia el exterior y la barba, en seis tirabuzones ordenados simétricamente, que aumentan de longitud hacia el centro.

Por las características de la pieza (lisa en la parte posterior para poder ser adosada a un muro) podemos concluir que nos hallamos ante un Herma. Los Hermae de jardín son elementos de carácter ornamental de gran tradición en el mundo antiguo. El origen de estas piezas se sitúa en la Grecia Clásica: tal y como señala Antonio Peña Jurado en su artículo Los hermas en el mundo clásico: estado actual de la cuestión, son una creación ática de finales del siglo VI a.C. que irá evolucionando desde su primitivo carácter como manifestación material del culto al dios Hermes (del que deriva su nombre), y que se colocaban como hitos en los caminos y, sobre todo, en los cruces de los mismos para indicar el rumbo a los viajeros, hasta pasar a ser en el mundo romano un elemento de ornamentación. En Roma las Hermae perdieron sus características iniciales y pasaron a convertirse en un tipo de estatuaria que representó a otras divinidades y, más frecuentemente, a personajes célebres de la política, las letras o el pensamiento. Los romanos las emplearon con profusión fundamentalmente en patios y peristilos de casas privadas pero también en espacios públicos como en las palestras de las termas o en los pórticos de los teatros.

Los Hermae romanos, abundantísimos en todos el Imperio, son de reducido tamaño y por una asimilación del culto popular con el ambiente báquico representan generalmente personajes del Thyasos Dionysiaco como el mismo Dionysos o Baco, el viejo Sileno, Príapo (hijo de Dionysos y Afrodita), el dios Pan... En éste caso, por la serenidad del rostro y la corona de pámpanos podría tratarse del propio Dionysos o de su hijo Príapo, dios de la fecundidad y los jardines.
Bibliografía RUÍZ BREMÓN, Mónica. Catálogo de Escultura. Museo Sorolla. 1993. p. 16; il. p. 16. Nº Cat. 3

SAN NICOLÁS PEDRAZ; M; MÓNICA. La colección arqueológica del Museo Sorolla. 1991. p. 344-345; A Distancia, 1991.

SANTA-ANA, Florencio de. Guía del Museo Sorolla. 1980. p. 45.

SANTA-ANA, Florencio de. Museo Sorolla (1991). 1991. p. 80.
Forma de Ingreso Legado fundacional
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