Descripción |
Bolsa rectangular realizada en malla de fibra vegetal con motivos decorativos escalonados y asa larga y estrecha.
La cultura Wichí es una de las culturas del Gran Chaco argentino. De todas las manifestaciones que conforman su cultura material cabe destacar el trabajo con fibras vegetales para elaborar objetos como esta "yika" o bolsa de caraguatá (Bromelia hieronymi), también conocida como "chaguar". El trabajo de la fibra de chaguar es una actividad femenina que comienza con la selección de las hojas a utilizar. Una vez, retiradas las espinas y separada la fibra de la parte externa, se procede a su limpieza, machacándola, raspándola y remojándola en agua tantas veces como sea necesario, para finalmente secarla al sol. Una vez hilada la fibra, se formarán los ovillos y se llevará a cabo el teñido usando diversos tintes vegetales, siendo los colores más usuales el negro, el marrón, el gris o el rojo. Las wichís tejen sus yicas en forma de malla apretada trabajándolas con una gruesa aguja de madera, dos palos clavados en el suelo y un hilo tirante entre ellos; sobre éste último se hace una primera hilada de lazada y luego una segunda entrecruzando los hilos de tal modo que sin apretar el nudo quede la malla abierta. Los típicos dibujos que tejen combinando diferentes colores reciben nombres alusivos a las especies animales que habitan en su entono; como "lomo de avestruz", "caparazón de tortuga", "cuero de lampalagua", "frutos de doca", "dedo de carancho", "pata de corzuela", "pata de loro", "cuero de yarará", "pata de zorro" o "pecho del pájaro carpintero".
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