Descripción |
Brasero con cuerpo de metal dorado de base circular con cintura de motivos geométricos calados. Se apoya sobre cinco patas en foma de ese, y éstas, a su vez, sobre pequeños pies de sección circular. Bandeja de cobre con dos asas (una de ellas perdida). Copa semiesférica moldurada en la base y calada en la parte superior, rematada por anilla de suspensión, para tapar el contenido.
Como contenedor de las brasas para desprender calor, los braseros existen desde la Edad Media en forma de recipientes metálicos, de piedra o de cerámica, cuadrados, redondos o en forma de olla. En el siglo XVI aparecen los que se componen de bacía, fuente o lebrillo, badila para remover las brasas, caja de madera circular o poligonal, y copa calada de metal para tapar el contenido. A esta tipología de brasero de caja responde la pieza que nos ocupa, que no obstante es todo metálico y responde a una fecha de producción posterior. En este sentido, cabe recordar que el brasero es uno de los sistemas de caldeamiento más corrientes en España, no logrando ser desbancado por la chimenea hasta los años treinta del siglo XIX.
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