Descripción |
Los Equinoideos, conocidos habitualmente como erizos de mar tienen su origen en el Ordovícico, existiendo en la actualidad aproximadamente 850 especies.
Es muy raro encontrar fósiles totalmente completos de los mismos, lo más habitual es encontrar el caparazón o trozos del mismo y las púas (radiolas) aisladas, pues estas se les caen al morir el animal. Otras piezas que es posible encontrar a pesar de su pequeño tamaño son partes del aparato bucal. El ejemplar tiene ambulacros petaloideos abiertos, periprocto marginal y poros sencillos fuera de los ambulacros. Los fósiles pertenecientes a esta familia se caracterizan por tener el ambulacro anterior muy diferenciado, abierto, mientras los ambulacros pares son cerrados, y por el disco perforado, con el borde posterior dentado o digitado. Aunque aparecen los primeros fósiles en el Mioceno, todavía son abundantes en los mares tropicales actuales.
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