Descripción |
La kabá gaida se distingue por su inusual tubo melódico, cuyo taladro interno decrece a medida que se aleja de la lengüeta sonora, formando un cono inverso. Cabe mencionar también la talla exterior, hexagonal, y la curvatura hacia adelante de su base, que sugiere un hipotético estadio evolutivo anterior en el cual podría haber incorporado un pabellón. Por lo demás, el tubo melódico de la kabá gaida posee la misma estructura que el de la dzhurá gaida: ambos están provistos de lengüeta simple; ambos poseen siete orificios frontales y uno posterior; su orificio frontal más alto es la marmorka; su nota tónica (que coincide con la que emite el tubo no digitable) se localiza en el cuatro orificio frontal; y su nota fundamental, que se obtiene tapando todos los orificios digitables, es la que identifica la clase de tubo melódico. Así, cuando el gaidar habla de una gaidunitsa en Re, debe entenderse que esta su nota más grave, pero su tónica La. Tanto la kabá como la dzhurá están capacitadas para emitir una octava diatónica, utilizándose la marmorka para introducir las alteraciones, lo que en la práctica permite ejecutar los modos mayor y menor y pasajes cromáticos.
El tubo no digitable de la kabá gaida está formado por tres piezas extensibles, generalmente anilladas en sus extremos para evitar fracturas. La ornamentación de las partes de madera consiste en rayados exteriores realizados en el torno y círculos incisos. Todos los tubos se unen al depósito de aire mediante cápsulas de ensamblaje de cuerno de vaca, aunque también pueden ser de madera y en la actualidad de plástico, más resistente a juicio de los artesanos constructores. El depósito de aire, una piel entera de cabrito amarrada con la flor hacia adentro, es de grandes dimensiones y obliga al intérprete a retirar el tubo insuflador en los primeros momentos del inflado y a soplar directamente a través de la cápsula de ensamblaje para abreviar el proceso.
La kabá gaida se toca en las montañas Ródope, localizadas en Tracia (centro-sur de Bulgaria). Por su registro grave, se usa para acompañar canciones y recitados. Su tonalidad más común es Mi, empleándose ocasionalmente instrumentos en Re para el canto femenino y en Fa para el masculino. Su repertorio también comprende canciones lentas de ritmo libre (bavni pesni) y danzas (horá), interpretadas en toda clase de celebraciones populares, sobre todo bodas. El intérprete, mientras toca, suele dejar colgando el tubo no digitable.
|