Descripción |
Metacarpo de cabra con perforación oval centrada, de 13,35 mm de diámetro máximo, situada en su diáfisis distal. Está roto en época prehistórica, faltándole la epífisis proximal y el resto de la diáfisis. Toda la pieza aparece con huellas de raspado.
Está decorada en ambas caras mediante series de líneas cortas y finas, más o menos paralelas, dispuestas en sentido longitudinal. En la cara dorsal se observan dos series de incisiones a uno y otro lado del surco longitudinal; la situada a la derecha está formada por 30 incisiones, y la situada a la izquierda por 15. En la cara palmar las incisiones se sitúan más cerca de los bordes y suman 15 en el borde derecho y otras 15 en el izquierdo (E. Álvarez en Arias y Ontañón 2004: 218).
La cueva de La Garma se encuentra situada en la localidad de Omoño, municipio de Ribamontán al Monte (Cantabria), en una colina del mismo nombre. Gracias a su larga secuencia estratigráfica, a la excepcional conservación de los restos de la Galería Inferior, y a sus pinturas rupestres, la Garma constituye uno de los yacimientos arqueológicos más importantes de la cornisa cantábrica. Se trata de una serie de galerías subterráneas a diferentes niveles, la mayor parte interconectadas. En 1991 se descubrieron las bocas de las cuevas conocidas como Garma B y Garma A, a partir de la cual se accede al resto del sistema, formada por la Galería Intermedia y la Galería Inferior.
La cavidad conocida como Garma A constituye el nivel superior de la serie de galerías que componen el complejo de La Garma. En la actualidad, es el único acceso practicable al interior del sistema. Se trata de una pequeña cavidad situada a unos 20 metros por encima de la Galería Inferior. El yacimiento arqueológico se encuentra tanto en el interior de la cueva como en el exterior, en la ladera del monte de La Garma, e incluye una larga secuencia de más de seis metros de potencia que va desde el Paleolítico Inferior y Medio hasta niveles sepulcrales del Calcolítico y la Edad del Bronce, pasando por una secuencia completa del Paleolítico Superior, así como un conchero mesolítico e indicios del Neolítico.
El periodo Gravetiense, también llamado Perigordiense en la terminología clásica, es una de las fases en que divide el Paleolítico superior en Europa. Iría desde hace unos 30.000 años hasta hace unos 22.000 años antes del presente. Se desarrolla durante un ciclo muy frío de la Última Glaciación, y destaca por la aparición en Centroeuropa de grandes estructuras de habitación y figuritas femeninas de marfil y hueso, las llamadas "venus". Entre la industria lítica, es característica la "punta de la Gravette" o "punta gravetiense", una punta muy aguda fabricada sobre una lámina estrecha y alargada.
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Bibliografía |
ARIAS CABAL, Pablo; ONTAÑÓN PEREDO, Roberto. La materia del lenguaje prehistórico : el arte mueble paleolítico de Cantabria en su contexto. Consejería de Cultura, Turismo y Deporte del Gobierno de Cantabria, 2004. La Garma: un descenso al pasado. Santander (m): Consejería de Cultura, Turismo y Deporte del Gobierno de Cantabria, 1999.
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