| Museo |
Museo Nacional de Escultura
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| Inventario |
CE2897
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| Clasificación Genérica |
Escultura
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| Objeto/Documento |
Escultura de bulto redondo
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| Autor/a |
San Martín, Julián (Lugar de nacimiento: Valdecuesta, 1762 - Lugar de defunción: Comunidad de Madrid, 1801)
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| Título |
San Francisco de Paula
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| Materia/Soporte |
Madera
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| Técnica |
Tallado
Policromado
Estofado
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| Dimensiones |
Altura = 68 cm; Anchura = 36 cm; Profundidad = 32 cm
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| Descripción |
Obra del escultor Julián de San Martín representativa de la plástica española de la segunda mitad del siglo XVIII, muy influida aún por el gusto rococó. Este refinamiento se exhibe especialmente en la figura del ángel que la acompaña, puesto que la mayor delicadeza y blandura de su tratamiento anatómico o los plegados de su ropaje, con más movimiento que los del hábito del santo, se aproximan a la sensibilidad rococó expresada también en su "Rafael" de la Colegiata de Medina del Campo (Valladolid) o en los ángeles del ático del retablo de la capilla del Hospital de la Venerable Orden Tercera de Madrid.
Por otra parte, el San Francisco, denota una mayor sobriedad en los plegados fuertes y aristados de su vestidura, reconocibles también en la imagen titular de la Catedral de Santo Domingo de la Calzada (La Rioja), con el que coincide en sus facciones o en la manera de hacer la barba desmadejada. La unidad del grupo reside en el refinamiento de ambas figuras especialmente apreciable en la minuciosidad de los rostros o las manos, que incluso en el caso del santo transparentan venas y muestran arrugas. Su preciosismo se ve enriquecido con los ojos de cristal, la talla de los dientes o el estofado de las alas del ángel.
La composición sigue fielmente la del grupo escultórico realizado en 1732 por Giovanni Battista Maini (1690-1752) para la basílica de san Pedro del Vaticano, que seguramente el autor conocería a través de grabados como el de Manuel Rodríguez del último cuarto del siglo XVIII. El ángel, por lo tanto, originariamente portaba la cartela con la inscripción CHARITAS, de la que actualmente carece.
Las pequeñas dimensiones de esta obra, coherente con la producción de su autor especializado en la escultura de formato reducido, permiten suponer que proceda de un oratorio o capilla privados y que incluso pudiera integrarse en un escaparate.
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| Iconografia |
San Francisco de Paula; Ángel
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| Firmas/Marcas/Etiquetas |
Julian de San Martin/ Fecit año de /1788 Madrid
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| Datación |
1788
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| Contexto Cultural/Estilo |
Neoclasicismo
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| Clasificación Razonada |
En la autobiografía que entregó a Ceán Bermúdez con destino a su Diccionario de los más ilustres profesores de las Bellas Artes en España, el burgalés Julián de San Martín refiere que, tras su llegada a la Corte con 16 años y al no ser admitido como discípulo de ningún maestro, "se dedicó a hacer obritas pequeñas en la tienda de un colorista de escultura", actividad que le permitió perfeccionar lo que el propio artista denominaba la "práctica material" y familiarizarse con la escultura de formato reducido. Hubo de destacar en tal modalidad pues años más tarde se le encomendaron varias figuras para el Nacimiento del Infante don Gabriel, que después se integrarían en el del Palacio Real, así como otras para "casas particulares" que igualmente serían de pequeñas dimensiones.
Es probable que este San Francisco de Paula proceda de un oratorio o capilla privados y puede sospecharse que, por su tamaño, estuviese colocado dentro de un escaparate que lo protegiese. Cuando lo firma ("julian de s. Martin. Fecit año 1788"), el artista contaba 26 años y hacía dos que la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando le había nombrado miembro de mérito. Fue en tal institución donde, además de recibir la enseñanza reglada, contó con el asesoramiento y corrección de los profesores Vicente Rudiez y Manuel Álvarez, trabajando también en esas fechas "al lado del anciano don Juan [Pascual] de Mena". Asimismo, el escultor anotó que en sus primeras obras "anduvo fluctuando, procurando seguir ya un maestro, ya a otro, procurando consinar sus reglas con la Naturaleza hasta que estableció estilo peculiar de su genio y gusto", lo que podría explicar las diferencias formales existentes entre las dos figuras que integran este conjunto.
Basado en el grupo marmóreo de igual asunto labrado en 1732 por Giovanni Battista Maini (1690-1752) para la basílica de San Pedro del Vaticano, cuya composición copia fielmente y que conocería a través de grabados como el firmado por Manuel Rodríguez en el último cuarto de aquel siglo (Calcografía Nacional), el ángel arrodillado a la izquierda del santo, que originariamente portaba la cartela con la inscripción charitas alusiva a la virtud del fundador de los Mínimos, muestra un tratamiento anatómico de mayor blandura y plegados más numerosos y movidos, encontrándose cercano a su san Rafael de la Colegiata de Medina del Campo (Valladolid) o a los ángeles que hizo para el ático del retablo de la capilla del Hospital de la Venerable Orden Tercera de Madrid, piezas próximas a la sensibilidad rococó. En cambio, la escultura de san Francisco de Paula, dispuesto en pie con su rostro mirando hacia lo alto, en actitud extática, presenta en su hábito de perfiles aristados y plegados de fuertes quebraduras una talla de mayor sobriedad, similar a la que exhibe el titular de la Catedral de Santo Domingo de la Calzada (La Rioja), que trabajó posteriormente y al que también recuerdan sus facciones y modo de hacer la barba desmadejada. Da unidad al grupo la calidad y refinamiento de ambas figuras, especialmente apreciable en el tratamiento minucioso de los rostros, sobre todo el del santo, surcado de arrugas, o en las venas de las manos. A su preciosismo contribuye el uso de ojos de cristal y la talla de los dientes, así como el rico estofado de las alas del ángel y del manto en que envuelve su cuerpo.
Se trata de un ejemplo representativo de la manera escultórica cortesana de la segunda mitad del siglo XVIII, muy influida aún por el gusto rococó, tal como lo consideraba el propio autor al definir su estilo como "más delicado que fuerte, más del gusto de espectadores tranquilos que de espíritus fogosos".
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| Bibliografía |
ALBARRÁN MARTÍN, Virginia. San Francisco de Paula. En: BOLAÑOS ATIENZA, María(dir). El Museo crece: Últimas adquisiciones 2005-2010. Madrid (m): 2011. pp. 88-89.
ARIAS MARTÍNEZ, Manuel; BOLAÑOS ATIENZA, María. Extraña devoción. De reliquias y relicarios. Madrid (m): 2021. pp. 122-123.
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| Catalogación |
Albarrán Martín, Virginia
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