Descripción |
Broche octogonal de plata, de lados cóncavos, con miniatura al gouache sobre marfil, que representa un busto femenino sobre un fondo de color azul claro. La figura, con el rostro ligeramente ladeado a la izquierda, eleva la mirada hacia arriba. De melena larga y ondulada, peinada con raya en el centro, de color castaño, que le cae sobre los hombros. Va vestida con armadura con el cuello redondo. Está realizada con la técnica del punteado para los detalles del rostro, mientras que el resto de la composición muestra una pincelada más empastada. Broche de plata con cerco de ocho abanicos semicirculares con tres perlas alfófares engastadas en cada uno de ellos. Adorno perimetral exterior de perlas aljófares engastadas en cápsulas cilíndricas en el centro de cada abanico.
En el siglo XIX la miniatura alcanza niveles de gran perfección y calidad artística. Su pequeño tamaño las hacía idóneas para aplicarlas a las joyas, generalmente broches, alfileres o colgantes. Estas piezas muchas veces tenían un carácter sentimental, regaladas por el novio a su amada que las portaba siempre consigo como un recuerdo amoroso. El personaje protagonista de esta pieza, Juana de Arco, fue una heroína medieval muy admirada en el periodo romántico y, por tanto, frecuentemente representada en pinturas, grabados o como en este caso, en miniaturas.
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