| Museo |
Museo Etnográfico de Cantabria
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| Inventario |
FD04956
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| Clasificación Genérica |
8. Personas y grupos; 7. Actividades lúdicas, espectáculos y actos públicos; 1.2.1. Asentamientos urbanos. Urbanismo.
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| Objeto/Documento |
Tarjeta postal
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| Título |
Sardinero, alameda de Cacho (Santander)
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| Materia/Soporte |
Cartulina
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| Técnica |
Fototipia
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| Dimensiones |
Altura = 9 cm; Anchura = 14 cm
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| Descripción |
Copia positiva obtenida por procedimiento fotomecánico, en formato horizontal, sobre soporte de papel con reverso estandarizado.
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| Contenido |
Anverso. La composición descubre un sendero peatonal, flanqueado por un frondoso arbolado, por el que transitan, y posan para la instantánea, varias personas. En el punto de fuga, se adivina una sencilla construcción de una planta, posiblemente uno de los varios hoteles y chalés que poblaron esta zona del Sardinero, de tanta popularidad en el momento porque, entre otros eventos, se celebraron allí las ferias de San Roque.
Reverso. Dividido por varias líneas horizontales en toda su superficie.
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| Iconografia |
Arquitectura civil; Vista de ciudad; Figuras humanas
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| Inscripciones/Leyendas |
Tinta, Español
Anverso. Manuscrito: Santander, 30/08/03, Bermark. Impreso: Serie IIª No. 7. Santander - Sardinero: Alameda del Cacho, Propiedad de S. Cuevas, Plaza Vieja, Santander.
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| Firmas/Marcas/Etiquetas |
Reverso. Estampilla de franqueo y sello de Correos, de 5 céntimos, con la efigie de Alfonso XIII.
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| Datación |
1903 (30 de agosto de 1903)
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| Contexto Cultural/Estilo |
Edad contemporánea
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| Lugar de Producción/Ceca |
SANTANDER
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| Clasificación Razonada |
La renovación de los centros urbanos que se desarrolló a partir de mediados del siglo XIX en diferentes ciudades europeas trajo aparejada la creación de nuevas calles y paseos. En Santander, el acuerdo para cimentar una alameda en el llamado Arroyo de la Cruzada, en el Sardinero, se realizó en 1874. Los vecinos la bautizaron con el nombre de Alameda de Cacho, por las posesiones que Celestino Cacho tenía en la zona aunque, posteriormente, se incluyó en el nomenclator oficial como La Cañía; en 1911, pasó a denominarse Joaquín Costa. Fue, en aquellos tiempos, muy popular, pues se instauró como el espacio de descanso y paseo por antonomasia, con fuente e, incluso, templete para la música.
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