| Inscripciones/Leyendas |
Anverso, ángulo superior izquierdo, Francés, Título de serie
ETUDES CLASSIQUES
Anverso, ángulo superior derecho, Número de lámina
PL. 10
Anverso, tercio inferior, centro, Francés, Título formal
LA SAINTE VIERGE
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| Firmas/Marcas/Etiquetas |
Anverso, ángulo inferior izquierdo, Francés, Autoría de editor
A. MOREL Editeur
Anverso, tercio inferior, centro, Francés, Autoría de pintor
D´APRÈS LEONARD DE VINCI
Anverso, ángulo inferior derecho, Francés, Autoría de litógrafo
J. LAURENS LITH
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| Clasificación Razonada |
Esta pieza forma parte de una serie de más cincuenta estampas que representan obras clásicas, realizadas por el litógrafo Jules Laurens y publicadas bajo el título abreviado de "Études classiques". Laurens fue un dibujante, pintor y litógrafo francés conocido principalmente por sus obras de temática oriental, debido a que fue elegido como dibujante por Hommaire de Hell para ilustrar su viaje por Turquía y Persia. A su vuelta a Francia en 1849, continuó su carrera en París, adquiriendo una gran reputación, que le valió para recibir importantes encargos.
Uno de ellos comenzó cuando el inspector general de enseñanza superior y conservador de antigüedades del Louvre, M. Félix Ravaisson, recibió, del Ministerio de Instrucción Pública, la tarea de realizar una serie de modelos clásicos. Para ello, contó con la ayuda de Jules Laurens, junto con quien llevó a cabo una selección de las mejores obras, tanto esculturas como pinturas, de la Antigüedad y del Renacimiento para plasmarlas en litografías. La publicación de las estampas comenzó en 1867, mediante entregas de doce estampas, impresas por la compañía de Lemercier y vendidas por la librería de Morel, gran amigo de Laurens. A partir de la cuarta entrega, Laurens contó con la ayuda de Georges Bellenger, dejando de participar ya en la sexta y séptima entrega.
Esta estampa en concreto representa a la Virgen María, de la obra de Leonardo da Vinci titulada Santa Ana, la Virgen y el Niño. Leonardo es uno de los artistas más importantes de la Historia del Arte. Nació en Vinci en 1452, mostrando ya una gran habilidad en sus primeros dibujos. La familia se traslada a Florencia en 1469 y su padre le lleva al taller de Verrocchio, donde comenzó su formación. Sus primeras obras muestran ya la gran importancia que dedicaba al gesto, a la actitud, a la expresión de los representados, puesto que consideraba la pintura como una obra intelectual. Además, inicia una nueva senda en el campo del retrato, aunando el retrato físico y psicológico. En 1482, se traslada a Milán, donde se convierte en urbanista, manteniendo su labor como pintor, realizando algunas de sus obras más importantes. Tras pasar por Mantua y Venecia, vuelve a Florencia, trabajando al servicio de César Borgia y posteriormente viaja a Roma, donde estuvo bajo la protección de Giuliano II de Médicis. En 1516, marchó a Francia, atendiendo la llamada de Francisco I, donde morirá, en el castillo de Cloux, cerca de Amboise, en 1519. Fue un gran pintor, además de escultor, ingeniero y urbanista. Realizó también estudios anatómicos y de botánica, siendo un adelantado a su tiempo. Además es junto a Miguel Ángel, el único pintor del Renacimiento que dejó materiales dedicados a la teoría de las artes, realizando un tratado de pintura que fue publicado tras su muerte. Estableció los principios del arte clásico con composiciones claras y serenas, armoniosas, prescindiendo de los detalles y lo anecdótico.
Su obra Santa Ana, la Virgen y el Niño la realizó en el primer cuarto del siglo XVI, probablemente encargada por el rey Luis XII de Francia, en conmemoración del nacimiento de su hija. En una composición piramidal, se representa a Santa Ana, la Virgen María y el niño Jesús con un cordero. La Virgen ha sido el personaje elegido de la composición para ser representada en la estampa.
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